Deportes

Las claves para evitar lesiones haciendo deporte

En las lesiones habituales, y desde el punto de vista fisioterápico, no importa demasiado la disciplina deportiva del deportista, bien sean corredores, tendemos a buscar causas remotas que pudieran causar la lesión y simplemente ni hemos tenido en cuenta la edad, sexo o la preparación del lesionado, por lo que hay que hacer un buen análisis no sólo de la lesión, a la que hay que tratar correctamente, sino también de la causa o causas que han podido llevar al deportista a sufrirla.

Calentamiento y Estiramientos

El calentamiento o «warm up» reduce muchos riesgos. Sirva para preparar todos nuestros tejidos para la práctica deportiva, el sistema cardio-respiratorio, músculos, tendones y ligamentos van a recibir más sangre y va a aumentar su temperatura para prepararse de cara al ejercicio, para una contracción muscular brusca, una torsión articular o un salto. Si un deportista profesional dedica al calentamiento en torno a una hora previamente a la competición y está mucho mejor preparado que un deportista habitual, ¿No parece absolutamente necesario que lo hagamos todos?

En cuanto a los estiramientos también es muy importante realizarlos para mantener o mejorar la elasticidad de los tejidos, músculos, tendones y ligamentos. Gracias a éstos se fomentará un movimiento más correcto, más limpio biomecánicamente hablando y más armónico. Permitirá no sólo mantener el músculo en un estado óptimo, sino también imprimir la fuerza necesaria, absorber las fuerzas que el cuerpo sufre y las que se producen por acción de la gravedad. Lógicamente en nadador o un ciclista sufren menos éstas fuerzas ya que en su práctica deportiva no hay impactos contra el suelo, pero en su entrenamiento general, al correr sobre la superficie que sea, o simplemente andando, ellos sí que van a sufrir estas fuerzas. Cuanto más elásticos seamos, mejor se transmiten y absorben las fuerzas. Se dan muchas lesiones como consecuencia de grupos musculares acortados, ya que alteran la biomécánica o limitan un movimiento que podría darse durante la práctica deportiva o en una caída. Muchos habréis oído hablar de la lesión por elongación muscular. La falta de elasticidad también produce lesiones a distancia, porque un músculo acortado pertenece a una cadena muscular que estará limitada por ese acortamiento.

Es importante tener en cuenta que los estiramientos también pueden acarrear lesions. Tan malo es no estirar como estirar excesivamente o mal. La eterna pregunta es: ¿cuándo tenemos que estirar? ¿Antes, duranto, o después del entrenamiento o práctica deportiva?

Y la respuesta es que unos estiramientos sirven para preparar a nuestros tejidos y ayudar en el calentamiento, como son los estiramientos con patadas, lanzamientos… Estos se incluirían en el calentamiento anterior al ejercicio. Atención, hay que hacerlos con precaución ya que es fácil lesionarse si no controlamos el movimiento.

Otros estiramientos sirven para mejorar la elasticidad, en este caso hablado de los estiramientos pasivos, en los que el músculo que estiramos va a llegar a un punto en el que ya no cede más y ahí es donde debemos mantener la postura entre 25-30 segundos. Este ejercicios ha de repetirse varias veces por grupo muscular así, cada repetición nos permitirá llegar más lejos que la primera. En este caso hablamos de ejercicios a realizar después de realizar la actividad deportiva.