Bar Txintxirri: ¿Por qué aquí las copas sonríen y los cócteles tienen… ¡vida propia? (Spoiler: ¡La magia está en el primer sorbo!)

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Foto extraida del video de Youtube


Bar txintxirri: ¿el lugar donde las copas van a morir de aburrimiento?

Donde lo más emocionante es ver cómo se derrite el hielo

Si alguna vez te has preguntado cómo sería pasar una noche en una lavadora lenta, el Bar Txintxirri es tu sitio. Aquí, los cócteles no solo pierden su chispa: la entierran bajo tres metros de tierra y le ponen una lápida con forma de servilleta doblada. El ambiente es tan vibrante como una reunión de condominios, y la música de fondo parece un playlist robado de la sala de espera de un dentista. ¿Quieres adrenalina? Intenta encontrar una oliva en tu Martini sin usar el móvil como linterna.

La carta de bebidas: un homenaje a la creatividad… dormida

La especialidad de la casa es el «Desilusión Fría», un cóctel que combina hielo, algo translúcido y el alma de quien lo prepara (spoiler: está en huelga). Si te aburres, siempre puedes jugar a «¿Es agua tónica o solo agua con burbujas tristes?». Y por si fuera poco, aquí tienes la carta:

  • Gin & Bostezo: ginebra con tónica y un toque de sueño profundo.
  • Mojito Sin Menta (ni Ganas): azúcar moreno, lima y un suspiro de resignación.
  • Cubalibre Del Pasado: ron, cola y nostalgia de cuando este sitio tenía clientes.

Clientes VIP: los que logran no quedarse dormidos

El público estrella son esos valientes que desafían al aburrimiento con frases épicas como «¿Ya es mañana?». Las conversaciones tratan sobre el pronóstico del tiempo o cómo funciona exactamente la gravedad (sí, caen en ese hoyo). Si buscas ligar, olvídalo: el picoteo más caliente aquí son las patatas fritas de la semana pasada. Eso sí, el Wi-Fi funciona de maravilla… para buscar otro bar.

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¿Tienes dudas? Nosotros tenemos respuestas (pero no esperes emoción)

¿Es verdad que aquí el tiempo se detiene?
Sí. Según la teoría de la relatividad de Txintxirri, una hora aquí equivale a tres días en el mundo real. Trae un libro. O dos.

¿Hay algún día «animado»?
Los miércoles hay karaoke. Bueno, «karaoke» es un decir: en realidad es gente murmurando canciones de Camilo Sesto mientras revisan su cuenta bancaria.

¿Alguna bebida que no sea aburrida?
Si pides un «Despertares», te sirven un café tan cargado que hasta la cuchara se pone a temblar. Eso sí, luego vuelves al letargo habitual.

¿Se puede celebrar algo aquí?
¡Claro! Celebraciones aptas incluyen: «cumpleaños de tu contabilidad», «despedida de soltero por aburrimiento» o «el día en que te das por vencido». Globos opcionales (pero sin helio, que altera el ambiente).

Bar txintxirri: la razón por la que los cócteles piden auxilio en morse

Bar Txintxirri: la razón por la que los cócteles piden auxilio en morse

¿Alguna vez un dry martini te ha guiñado un ojo con SOS en código morse? En el Bar Txintxirri, los cubitos de hielo no se derriten: se desmayan de emoción al ver cómo los mixólogos traducen ginebra a puntos y rayas. Aquí, los cócteles no se sirven, se *telegrafían*. Imagina un Old Fashioned que, en vez de azúcar, usa señales luminosas para decir “¡sácame de esta copa, que el cliente lleva tres horas filosofando sobre la vida!”. Si tu mojito empieza a parpadear como una luciérnaga con síndrome de estrés postraumático, es normal. Txintxirri es el único lugar donde tu bebida puede pedir refuerzos… y un taxi, por si las 2 a.m. se ponen turbias.

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El manual (no tan) secreto de Txintxirri: de la coctelería a la criptografía

En este antro, las barras de labios no son el único código que descifras a las 3 de la mañana. La carta es un *morse mixológico*:

  • ··· — — — ··· (SOSpresso Martini): café concentrado, vodka y un mensaje oculto que dice “necesito una siesta”.
  • ·—· ·—· ·—· (Piña Colada: ···—··): si escuchas “¡ay, madre, el hielo se me acabó!”, es que la has agitado demasiado.
  • —— ···· ··— (Margarita en morse): tequila que titila. Literal. Si ves la sal en el borde formando un “···· · ·—·· ·—” (HELP), pide otro round.

Los camareros llevan auriculares estilo operador de los 40… pero en realidad solo escuchan playlists de Bad Bunny a volumen *decibelio prohibido*. Eso sí, si tu daiquiri empieza a hacer sonar un triángulo como si fuera una alarma de submarino, corre: o hay happy hour o alguien olvidó pagar la cuenta.

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¿Te has quedado en ·−−·−− (preguntas)?

¿Los cócteles usan morse o solo son víctimas del WiFi del bar?
Morse puro. Aunque a veces se colapsan y piden una actualización de software (traducción: más limón y menos juicio).

¿Puedo enviar un mensaje en morse al bartender pidiendo otra ronda?
Sí, pero cuidado: si haces ···−·− (SOS + “urgencia máxima”), te traerán un chupito… y una factura con la letra pequeña en arameo antiguo.

¿Por qué mi cubata emitía ··−−·· (WTF)?
Normal. Es la respuesta automática cuando alguien pide hielo extra a las 3 a.m. y el congelador está en huelga.

Si el bar se queda sin luz, ¿los cócteles cantan rancheras para comunicarse?
No confirmado, pero sí garantizamos que el último cliente en irse deberá traducir la carta morse… *a lenguaje de señas con una mano y un limón en la otra*.