Foto extraida del video de Youtube
¡Cómo conseguir tu cita en extranjería sin morir en el intento (o perder la cordura)! 🐌💻
El sistema online: una carrera de obstáculos donde tu rival es un caracol con internet 🐌
¿Alguna vez has intentado refrescar una página web más rápido que un adolescente buscando wifi? La web de extranjería es como un *clicker game* frustrante: pasas horas pulsando F5 hasta que, ¡oh, milagro!, aparece una cita… en 2025. Trucos:
– Autorellenar datos es tu nuevo superpoder (si el navegador no se crashea antes).
– Usa tres dispositivos a la vez: el móvil, la tablet y el portátil de tu prima (que juró no prestarte nunca más).
– Horarios zombi: madruga a las 6:00 AM o trasnocha como si fueras a un concierto de Bad Bunny. Las citas fugaces aparecen cuando el servidor está de buen humor.
La oficina física: donde el tiempo se dilata más que un chiste malo en una reunión familiar
Si optas por ir en persona, prepárate para una experiencia mística. Llegarás a las 7:00 AM y verás una fila que rivaliza con la del primer iPhone. Lleva:
– Un termo de café más grande que tu desesperación.
– Un libro (recomendado: *“Cien años de soledad”*, para empatizar con Gabo).
– Un cartel de “Se vende alma” por si necesitas sobornar a algún funcionario interdimensional.
Y no, no hay baño. La vejiga es solo el primer nivel de este *boss fight*.
Cuando todo falla: el arte de sobrevivir sin llorar (mucho)
¿Ya probaste llamar por teléfono? Ja. Es como buscar un unicornio en un parking de Ikea. Si logras comunicarte, celebra con una tarta… porque has vencido al sistema. Alternativas:
– Meditación trascendental (para no maldecir en arameo cuando la web se traga tu solicitud).
– Grupos de WhatsApp de expats: comparten tips, memes y lágrimas virtuales.
– Soborno emocional: lleva galletas a la oficina. ¿Ético? Dudoso. ¿Efectivo? Un 50% de que no te lancen la mirada asesina.
¿Te pica la duda? Aquí las respuestas que necesitas (antes de que te salgan canas)
¿Y si la web se cae cada vez que veo una cita disponible?
Respira hondo y repite: *“No romperé el teclado”*. Usa extensiones de autorefresco, pero sin pasarte: si abusas, la web te mandará a un loop infinito de captchas.
¿Vale la pena ir sin cita?
Solo si te gusta el drama. Te atenderán cuando los astros se alineen y Mercurio retrógrado lo permita. Mejor sigue intentando online.
¿Qué hago si mi cita es para dentro de 11 meses?
Acepta tu destino y programa recordatorios. O vuelve a la fila digital cada día. ¡Algún alma caritativa cancelará (o se mudará a otro planeta)! 🌍✈️
—
Nota mental: Si lograste tu cita, eres oficialmente un héroe anónimo. Si no, siempre queda la opción de adoptar un caracol como mascota y domesticarlo para que te avise cuando haya huecos. 🐌🔔
Cita extranjería: La odisea burocrática que nadie te contó… ¡y cómo sobrevivir a ella! 😱📅
El laberinto digital: cuando la web de extranjería se convierte en tu némesis
Si creías que conseguir entradas para el concierto de Taylor Swift era difícil, no has intentado sacar cita previa en Extranjería. La web parece diseñada por un troll bajo los efectos de tres Red Bulls: entras, introduces tu NIE, seleccionas “cita”… ¡y zas! Error 404. ¿Solución? Refrescar 87 veces, rezar a San Expedito y prometerle a tu suegra que irás a misa. Pro tip: las citas suelen liberarse a las 00:00, aunque más de uno ha jurado ver fantasmas entre tanto clic nocturno. 🧟♂️💻
Documentos: el kit de supervivencia (que nadie te dijo que necesitabas)
Llegar al gran día sin el papel X-38/Z/5 firmado por un notario de Marte es como ir a un examen sin pantalones. La lista de requisitos es más larga que la de Santa Claus:
– Pasaporte (original, copia, y copia de la copia por si las moscas).
– Empadronamiento actualizado (que no tenga más de 27 segundos de vida).
– Justificante de tasa 790 (sí, ese que pagaste pero el sistema “no encuentra”).
Lleva todo en una carpeta y duplica cada documento. ¿Por qué? Porque Extranjería es el único lugar donde “lo perdimos” es el lema oficial.
El día D: cuando el guardia de seguridad es tu juez final
Te presentas impecable, con puntualidad británica… y el de la entrada te dice que llegaste 3 minutos tarde. El protocolo es claro: sonríe como si fueras a Miss Universo, asiente ante cada frase y NO cuestiones por qué el sistema “falló” (ya saben, el mismo que te hizo sudar para la cita). Si logras llegar al funcionario, evita estornudar: podría interpretarse como un intento de soborno. 🕶️🗂️
¿Tienes dudas? Aquí las respuestas que Google no suelta ni con chantaje
¿Y si la web se cae cada vez que intento pedir cita?
Bienvenido al club. Usa navegadores obsoletos (Internet Explorer, por ejemplo). Parece broma, pero funciona.
¿Qué hago si me falta un documento el día de la cita?
Llora. Luego, vuelve a la fase 1 y repite el proceso. O trae un chocolate para el funcionario (no garantizamos resultados).
¿Puedo elegir hora o me asignan una aleatoria?
Ja. Ja ja. Las citas son como los eclipses: aparecen cuando quieren y si no las agarras al vuelo, adiós hasta el próximo siglo.
¡Y recuerda! Sobrevivir a Extranjería te da más orgullo que terminar un sudoku de 1000 piezas. 🏆📜