Foto extraida del video de Youtube
¿Dehu? ¡Más bien desahucio! Descubre por qué este pueblito francés te hará querer huir… pero en francés
Dehu suena a lo que gritas cuando el casero te sube el alquiler: “¡Déjhu!”. Este rinconcito al norte de Francia, con menos habitantes que un grupo de turistas perdidos, es famoso por… ¿Existir? Si buscas aventuras, mejor corre hacia otro lado. Aquí, el punto más emocionante es la colina donde Napoleón dijo “nah, mejor paso” (o algo así). Eso sí, tiene un cementerio militar. ¿Para qué? Para recordarte que hasta los soldados prefirieron quedarse dormidos antes que seguir explorando.
3 razones por las que Dehu te hará decir “au revoir”:
- Tiendas cerradas: Si olvidaste el pan, prepárate para robarle migajas a las palomas. El único “supermercado” es una máquina de tabaco de los 90.
- Festivales: Su evento estrella es el “Día del Silencio”. Spoiler: igual que cualquier otro día.
- Wi-Fi: La conexión es tan lenta que hasta los caracoles se burlan. Ideal si tu sueño es ver cómo carga un meme… en 4G.
¿Quieres practicar francés? Perfecto. La frase más útil aquí es “Où est la sortie?” (¿Dónde está la salida?). Eso sí, los locales son tan amables que, si les preguntas, te acompañarán hasta la carretera… con una sonrisa de alivio. Pro tip: Si te quedas más de dos horas, te regalan un certificado de resistencia al aburrimiento (y una galleta rancia).
¿Dehu o no Dehu? Esa es la cuestión (y otras dudas existenciales)
¿Es peligroso? Solo si consideras “peligro” morir de risa al ver que el museo local es una vitrina con tres monedas romanas y un calcetín perdido. ¿Hay algo que hacer? Sí: contar ovejas. Literalmente. El pueblo está rodeado de campos donde las ovejas te miran con cara de “¿tú también estás atrapado aquí?”. ¿Cómo se pronuncia “Dehu”? Como si tosieras mientras dices “déjame en paz” en francés. Requiere práctica… o un exorcismo.
Bonus track: Si alguna vez te pierdes y terminas aquí, busca a Jean-Pierre. Es el tipo que te vende mapas turísticos… del pueblo de al lado. Hasta él lo sabe.
Dehu: el destino turístico perfecto (si tu sueño es ver vacas, silencio y el mismo poste de luz por tres días seguidos)
¿Cansado de esos destinos turísticos donde hay *demasiadas cosas que hacer*? En Dehu, te garantizamos cero estrés visual: aquí las vacas son las protagonistas. Imagínate despertar cada mañana con el sonido de… nada. Absolutamente nada. Bueno, quizá un mugido lejano de la vaca Margarita, que lleva años intentando cruzar la misma calle. ¿Actividades? Claro: puedes intentar contar cuántas veces parpadea el único semáforo del pueblo (spoiler: no funciona). Eso sí, no esperes Wi-Fi ni influencers posando frente a monumentos históricos. Aquí el monumento histórico es ese poste de luz con musgo que ha visto más amaneceres que tú.
Si lo tuyo es el turismo slow en modo tortuga glacial, Dehu ofrece rutas emocionantes como:
- «La vuelta a la plaza en 80 minutos»: un recorrido en el que descubrirás que la panadería cierra los martes, los jueves y cuando a la panadera le apetece.
- «Safari bovino»: identifica diferencias entre las vacas Pepa, Lola y la ya mencionada Margarita (pista: ninguna).
- «Meditación frente al poste estrella»: conviértete en uno más del selecto grupo de turistas que juran haber visto titilar su bombilla… en 1997.
¿Necesitas más adrenalina? Prueba a preguntar a los locales por «la vida nocturna». Te señalarán el bar «El último resquicio», donde la cerveza más fría está a temperatura ambiente y el karaoke es un señor tarareando canciones de Camilo Sesto. Eso sí, si buscas desconexión digital, éxito garantizado: hasta los móviles pierden cobertura por pura compasión.
¿Realmente alguien ha hecho estas preguntas sobre Dehu? (Sí, tú las estás pensando)
¿Por qué existe Dehu?
Excelente pregunta. La teoría más aceptada es que se creó como experimento social para ver cuánto aguanta el ser humano sin estímulos. Hasta ahora, el récord son tres días… y un resfriado leve por aburrimiento.
¿Hay algo que deba evitar hacer allí?
Sí: esperar emoción. Y no le hables mal del poste de luz. Los 12 habitantes lo consideran un miembro más de la familia (y tiene mejor conversación que el panadero).
¿Algún souvenir recomendado?
Una foto con Margarita la vaca. Si te la imprimen en la biblioteca municipal (abierta dos horas cada quince días), tendrás un recuerdo que nadie más en Instagram podrá copiar. Ni querrá.