Foto extraida del video de Youtube
Refranes murcianos: cuando el sentido común se viste de huerta y pimienta 🌶️
La huerta habla (y no es por las berenjenas)
En Murcia, los refranes son como los tomates de la huerta: jugosos, coloridos y con un puntito ácido que te remueve hasta el alma. Aquí no se anda con rodeos. Si un murciano te suelta “Agua que no corre, se vuelve morcilla”, no está hablando de hidrología ni de embutidos. Te está diciendo, sin paños calientes, que si te estancas, acabarás hecho un lío (y no precisamente de los ricos). La sabiduría popular aquí se riega a manta, como los campos, y se sazona con esa picardía que solo entiende quien ha visto amanecer entre limoneros.
Del dicho al hecho… hay menos que de Murcia al Mar Menor
¿Que por qué los refranes murcianos pican? Por la misma razón que el pimentón de la región: para que no se te olviden. Frases como “En abril, aguas mil… y si no, a freír espárragos” resumen el carácter práctico de esta tierra. Aquí no hay espacio para filosofías rimbombantes. Si la lluvia no llega, te jodes y te adaptas, como el que cambia el cultivo porque el río Segura está más seco que un bocadillo de pimientos sin aceite. Eso sí, siempre con una sonrisa entre dientes y un “¿qué le vamos a hacer?” que vale por tres tratados de resiliencia.
Refranero 2.0: actualizando la huerta
Los murcianos modernos no han tirado la toalla (ni la han usado para secar la ensalada, que eso es pecado). Han adaptado sus dichos a los nuevos tiempos sin perder la esencia: “Más lento que un domingo de agosto en la autovía de Almería” o “Estás más perdío que un guiri en el Rastro de Murcia”. Son lecciones de vida con GPS incorporado, porque aquí hasta el sentido común tiene DNI huertano. Y si no te gusta, ya sabes: “Ajo y agua, que dijo el murciano al coche cuando no arrancaba”.
¿Te has quedado con más dudas que un conejo en un sembrado de lechugas? 🐇
¿Los refranes murcianos sirven para ligar?
Claro. Prueba con un “¿Eres la Catedral de Murcia? Porque me tienes aquí dando vueltas como un pardillo”. Efectividad: 50%. Riesgo de que te partan la cara: 50%.
¿Por qué siempre mencionan comida?
Por la misma razón por la que existimos: sin huerta, no hay paraíso. Un murciano sin su zarangollo o su pastel de carne es como un chiste sin gracia: algo triste y que mejor no mencionar.
¿Puedo usarlos si no soy de Murcia?
Sí, pero con precaución. Recomendamos dos cucharadas de ironía diarias y no mezclar con refranes serios. Efectos secundarios: ganas de plantar albahaca en el balcón y decir “hostia” cada tres segundos.
Refranes murcianos que te harán reír, reflexionar y querer un limón granado 🍋
Cuando en Murcia hace calor hasta los refranes sudan limones 🥵
¿Sabías que aquí hasta los dichos tienen acento huertano? Si un murciano te suelta «Más tieso que la mojama en Nochebuena», no pienses que habla de un pescado bailando flamenco. Es su manera elegante de decir que alguien está más tieso que el turrón duro de la abuela. Y si te dicen «Eres más pesao que la burra de Blas», no te ofendas: es un halago compararte con un animal legendario que, al parecer, comía piedras para desayunar.
Refranes que saben a azahar y pimentón 🌸
Aquí hasta las verdades duelen… pero con gracia. Si alguien te advierte «No te fíes del agua que no hace espuma», no es un curso de química casera. ¡Te están avisando de que hasta el vecino más callado puede tener una boda secreta con tu prima! Y si escuchas «En casa del herrero, cuchillo de palo», no corras a comprar cubiertos: es la excusa perfecta para justificar por qué tu tío Paco, fontanero, tiene el grifo de casa goteando desde el 2003.
- «El que no corre, vuela… y el que vuela, p’al limonero»: Filosofía murciana para explicar por qué todos acaban robando limones del árbol del abuelo.
- «Más chulo que un ocho»: No, no es un elogio a los tranvías. Es lo que dicen cuando tu primo se compra una camisa a lunares… y cree que es Armani.
- «Estar más perdío que un pulpo en un garaje»: La versión huertana de «no tengo ni idea de qué hago con mi vida».
¿Los murcianos tienen un refán para todo? Spoiler: sí 🍋
Si te preguntas por qué aquí hasta los insultos suenan a poesía, prueba con «Tienes más cara que espalda». No, no es un cumplido a tu nueva cresta de gel. Es la forma murciana de decir «¿en qué momento perdiste el sentido de la vergüenza?». Y si alguien te suelta «Vas a acabar como el rosario de la aurora», no es un tutorial de manualidades: es la versión cateta de «te va a caer una bronca bíblica».
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🤔 ¿Murcia inventó el sarcasmo antes que los memes?
P. ¿Por qué todos los refranes murcianos mencionan limones?
R. Porque aquí hasta el sentido de la vida tiene forma cítrica. Y porque sin limón granado, ni los chistes tienen gracia.
P. Si un murciano me dice «Eres más largo que un día sin pan», ¿me está llamando aburrido?
R. Peor: te acaba de comparar con una jornada de verano murciano (45°C + cero bebidas frías). Lleva agua la próxima vez.
P. ¿Cómo distingo un refrán real de uno inventado?
R. Fácil: si suena a mezcla de sabiduría popular y chascarrillo de barra de bar, es 100% auténtico. Si menciona limones, doble puntos extra.