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¿Cómo limpiar el horno de su casa?

El horno, como electrodoméstico de casa, también debe ser limpiado con bastante frecuencia. Al igual que otros electrodomésticos, lo usamos a diario y, en éste, se va acumulando mucha suciedad. Al ser un espacio con poca visibilidad, a menudo lo dejamos sucio sin saber. Por ello, conviene limpiar el interior después de cada comida o uso ya que sino se puede acumular la suciedad y es más difícil de quitar.

Limpieza profunda con productos naturales

Emplear productos naturales es lo más recomendado, por varios motivos, el principal de los cuales es que los limpiadores de horno son en general muy tóxicos y, además de exigir el uso de elementos de protección, como guantes y mascarillas, hay que extremar los cuidados para evitar que algo se transmita después a los alimentos.

Para limpiar con productos naturales, se debe crear una pasta con bicarbonato de sodio y agua. Con el fin de que la pasta gane fuerza, también es posible añadir sal. Esta pasta se debe esparcir por todas las superficies interiores del horno, incluso el cristal de la puerta, y dejar una hora para que actúe. Cumplido ese tiempo, se retira con un paño empapado en vinagre. La suciedad también se irá.

Es posible que después de un rato aparezca sobre las superficies limpiadas de esta manera una ligera capa blanquecina. La causa será que haya quedado una muy fina película de bicarbonato. Basta con limpiar con detergente lavavajillas común para eliminarla.

Productos específicos para la limpieza del horno

Si la suciedad está demasiado impregnada, o adherida a las superficies interiores del horno, es probable que la pasta de bicarbonato y el vinagre no resulten suficientes. En estas circunstancias, no queda otra opción que recurrir a los limpiadores fabricados de forma industrial. Cuando se empleen, además del uso de guantes y mascarillas protectoras, es esencial que la cocina esté bien ventilada. También es importante proteger el suelo con papel de periódico en las partes cercanas al horno, para evitar que la sustancia dañe el color de las baldosas.

El procedimiento es simple. Se rocía el limpiador en el interior del horno y se deja actuar. El tiempo necesario es variable, según cada caso: hay que leer y respetar las instrucciones que el fabricante incluya en la etiqueta. Después, se moja un estropajo metálico en agua caliente o templada y se frotan las superficies con fuerza para eliminar la suciedad adherida. Para evitar rayar el cristal de la puerta, se debe usar un estropajo de metal muy suave o una esponja común de cocina. Luego se retiran los restos de limpiador con papel de cocina.

Un último paso cuando se utilizan estos productos de limpieza consiste en la eliminación de los vapores tóxicos. Para lograrlo, se debe encender el horno a unos 50 grados y dejarlo así entre 5 y 10 minutos. Después se apaga y se deja que el electrodoméstico se airee con la puerta abierta durante una hora.

 

Una de las principales claves para limpiar el horno es de limpiarlo a diario tras cada comida pero, en el caso de que está no se haya efectuado, es aconsejable que usen antes los productos naturales al uso de productos químicos que venden en cualquier supermercado. La mejor alternativa en cuanto a productos naturales son el vinagre y el bicarbonato de sodio.