La piel de nuestro perro: una verdadera barrera contra las infecciones

Aunque no nos demos cuenta, la piel del perro es una de los órganos más importantes que le protegen de numerosas infecciones gracias a su gran cantidad de bacterias «buenas». Además de protegerle a él, nos protegemos a nosotros mismos de alguna de estas enfermedades. De esta forma, cuando la piel del perro está en mal estado, las infecciones no tardan en aparcer. En este artículo te damos las claves para mantenr la piel de tu perro sana y para que sepas, si en algun momento puede sufrir alguna, como detectarla y curarla.

La piel del perro es un órgano muy especial. Recubre el cuerpo del can, y se comporta como una gran barrera que le protege de las infecciones y gérmenes del mundo exterior. Ello explica que cuidar la piel del perro sea importante tanto para el animal, como para el resto de la familia.

Este parapeto natural del perro tiene ungrosor de entre uno y cinco milímetros, en función de las zonas del cuerpo. A pesar de que la mayor parte de la piel del perro carece de glándulas sudoríparas (a diferencia de la humana) sí contiene unos visitantes diminutos pero esenciales para mantener su salud: las bacterias.

«La piel del perro cuenta con muchos microorganismos; algunos de ellos son patógenos pero otros son buenos, heredados de su propia madre», explica el veterinario José Enrique Zaldívar, autor de la bitácora Blog veterinario.

Estos pequeños seres que viven en la piel del perro actúan como un ejército en miniatura de defensa para el animal. Frenan los gérmenes y evitan que el can enferme o contraiga infecciones.

¿Cómo enferma la piel del can?

Un perro sano mantiene el equilibrio entre las diferentes especies de bacterias que habitan en su piel. El problema surge cuando este mecanismo de defensa no funciona o se produce un desequilibrio entre las diferentes especies.

Si la barrera natural de bacterias se desmorona o unas bacterias ganan en número a otras, es sencillo que se produzca una infección de forma muy rápida. Cuando esto ocurre, la piel del perro enferma.

El can queda desprotegido del ataque de las distintas enfermedades y, en especial, permanece vulnerable a las infecciones de piel.

Un pelo sano también reduce las enfermedades del perro

El pelo del perro también le ayuda a proteger su piel. El pelo funciona como un obstáculo que frena la llegada de bacterias y virus perjudiciales, que quedan retenidos en el manto -en ocasiones muy espeso- del animal.

La capa de pelo del can protege su piel, pero también ayuda al animal a regular la temperatura de su cuerpo. «El manto del perro crea huecos, que resultan trampas para al aire, que queda retenido en estas oquedades de pelo», asegura la guía ‘Merck', de salud para mascotas.

Esta función protectora explica la importancia de cepillar el pelo del perro cada día, alrededor de unos diez minutos. La fricción con las púas del cepillo retira la suciedad del pelaje, pero también los agentes patógenos retenidos.

Enfermedades de la piel del perro

La piel del perro dice mucho de su salud. Por ello, los problemas en este importante órgano que recubre el cuerpo del can pueden advertir de que el perro tiene un problema.

Cuando la piel del perro falla, algunas enfermedades no tardan en llegar. A continuación se recogen algunas de las dolencias de piel más frecuentes en canes.

  • Infecciones de la piel del perro por bacterias. «Las infecciones por bacterias patógenas están entre las enfermedades de piel más frecuentes en perros», señala Zaldívar.Las infecciones se producen cuando el equilibrio entre las bacterias que viven en la piel del perro se rompe, a causa de una enfermedad o debilidad.

    Entonces, el número de una o varias especies de bacterias crece por encima de lo saludable. Se dice que existe una infección.

  • Sarna en el perro. La sarna es una enfermedad del perro provocada por un ácaro, un pequeño -aunque muy nocivo- animal similar a una araña en miniatura.La sarna provoca un picor intenso en el perro, rojeces y calvas en las zonas afectadas. Aunque por sí sola no es mortal, cuando aparece, hay que acudir al veterinario con urgencia.
  • Garrapatas y pulgas son otros organismos peligrosos que atacan la piel del perro, en especial, cuando suben las temperaturas exteriores.
  • Algunos parásitos intestinales del perro también explican algunos problemas de la piel. Por ello, cuando el can sufre pérdida de pelo o inflamación en su piel, hay que acudir al veterinario.
  • Las alergias, tanto alimentarias como estacionales, pueden causar algunos problemas de piel en el perro. Como ocurre en las personas, la epidermis del can se puede irritar y escamarse.La dermatitis atópica es una alergia de la piel del perro, que se hereda de los padres a sus cachorros.
  • El aburrimiento del perro también puede detectarse en su piel: un animal sin estímulos puede sufrir ansiedad.Una de las señales de la falta de estímulos en el perro es que aparezca uncomportamiento compulsivo, que puede traducirse en arañazos repetidos sobre su cuerpo, con el consecuente daño a su piel.

 

Para prevenir las enfermedades que pueda atrapar el perro a través de la piel, es aconsejable que le cepillemos diariamente, o al menos 3 veces a la semana. Con uno cepillado de unos 10 minutos al día será suficiente y puede marcar una gran diferencia para él. De la misma forma, se aconseja bañarlo al menos una vez al mes con un jabón especial: usar un jabón de baño tradicional para humanos puede dañar su piel. Finalmente, realizar varias visitas al veterinario durante el año puede ser muy buena para asegurarnos de que nuestro pequeño compañero goza de una salud plena.

Viajar con un perro en el coche: un pasajero más

Cuando nos hacemos un pequeño trayecto en coche con nuestro perro o incluso cuando nos hacemos un viaje más largo tenemos que tener algo en cuenta: el perro se considera un pasajero más en el coche. Por lo tanto, debe ir correctamente atado con una correo que sirve de cinturón de seguridad. Y aunque no se tiene nunca en consideración, es algo muy importante para el conductor como para el perro, para que no sufra golpes en caso de frenadas bruscas.

El 51% de los usuarios reconoce haber sufrido una situación de riesgo al volante provocada por un animal y el 20% admite no usar ningún sistema de protección en el vehículo cuando viaja con mascotas. Así lo confirma un estudio del RACE y Royal Canin. En un impacto frontal a 50 kilómetros por hora los animales sin sujeción multiplican por 35 su propio peso

Sin embargo, el informe advierte: en el caso de un impacto frontal a 50 km/h, los animales que viajan sin sujeción en el coche multiplican por 35 su propio peso. A esta velocidad, un perro de 20 kilos tiene una carga de impacto de 700 kilos.

Es decir, supone un peligro para la seguridad de los ocupantes y del propio can. Esto se puede traducir en lesiones graves, e incluso mortales, para quienes viajen en el vehículo.

Un perro suelto en el coche es un riesgo seguro para todos. Un can que viaja suelto en el vehículo no solo resulta una fuente de distracciones para el conductor, con el consiguiente riesgo de accidente, sino que en caso de colisión todos los pasajeros, incluido el animal, pueden resultar heridos o fallecer.

Tampoco todos los dispositivos de anclaje del perro en el coche tienen el mismo nivel se seguridad.

Anclajes del perro para el coche: arneses

El arnés con un enganche para el can en el vehículo es un dispositivo que se ancla en el cinturón de seguridad del coche y, en caso de colisión, la hebilla del arnés corre el riesgo de romperse.

En caso de colisión, el arnés de un solo enganche corre el riesgo de romperse

Como consecuencia, el perro chocaría contra los asientos delanteros, lo que podría provocar en el animal lesiones graves o mortales. El arnés de un solo enganche tiene un precio medio de 7,5 euros y se puede escoger entre diferentes tamaños, según la corpulencia del can.

Arneses con doble enganche para canes

El arnés con dos enganches para el perro en el coche se caracteriza por evitar el desplazamiento del animal hacia delante en caso de colisión.

El arnés con doble sujeción es la forma más segura de viajar con perro en coche

Para garantizar su eficacia, debe contar con un sistema de anclaje que mantenga al perro con poco margen de movimiento. De esta manera, el arnés evita que choque contra el asiento del conductor en caso de accidente. Su precio oscila entre los ocho y diez euros, según su tamaño.

Transportín sujetos al cinturón de seguridad

Este método de anclaje corre el riesgo de romper los puntos de sujeción del cinturón al que se sujeta. Esto puede provocar lesiones graves tanto al animal como al resto de los pasajeros, ante un posible accidente.

Transportín en el maletero del coche

Este dispositivo se utiliza solo cuando tanto el can como el transportín son de tamaño grande. Se coloca en el maletero del coche, en posición transversal al sentido de la marcha.

No obstante, en caso de accidente, hay posibilidad de que los ocupantes de las plazas traseras sufran lesiones.

La rejilla divisoria en el coche para el perro separa la cabina del maletero de vehículo. Sin embargo, durante una colisión también hay riesgo de que el animal sufra lesiones muy graves. Por este motivo, lo más adecuado es combinar el transportín con una rejilla divisoria.

Además de ser una cuestión vital para el perro y de seguridad para el conductor, el perro irá mucho más cómoda y tranquilo si va debidamente atado. Un perro mareado e intranquilo no nos permite disfrutar del viaje y finalmente, se termina haciendo más duro para todos los ocupantes del vehículo. También podemos añadir seguridad y tranquilidad al perro arropándole con sus mantas y sábanas habituales o con sus juguetes preferidos.

¿Es bueno darle a los gatos leche?

Uno de los premios favoritos de los gatos es la leche y los yogures. No es extraño para los amantes y dueños de estos felinos verlos enloquecer cuando se les da una cucharada de yogur u otro producto lácteo como el queso. Siempre que no sean alérgicos, es importante darles estos productos como un premio y no que se convierta en una comida habitual, sobre todo para los gatos adultos.

¿Pueden los gatos tomar leche y yogures?

Hay gatos a los que les encanta la leche. La prueba para saber si el felino con el que vivimos es uno de ellos es sencilla: basta con servir un cuenco de cereales y dejarlo a su alcance. ¡El gato que disfruta de la leche no dudará en abalanzarse sobre el recipiente! Otros felinos, además de con la leche, enloquecen con los yogures, quesos y otros productos lácteos.

Aunque la imagen de los gatos alimentándose de leche es recurrente en el cine, la literatura y las artes escénicas, ¿es bueno o peligroso este alimento lácteo para los felinos comensales? Los gatos adultos no necesitan ingerir leche. Es más, algunos felinos, como ocurre en las personas, no toleran bien la lactosa. Para estos animales, tomar un plato de leche suele implicar cuanto menos problemas gástricos.

Gatos con alergia a la leche

Los gatos, además, pueden desarrollar alergia e intolerancia a algunos alimentos, entre ellos, la leche. De hecho, las reacciones adversas a la leche se encuentran entre las alergias alimentarias más frecuentes en felinos.

La intolerancia a la lactosa de la leche es bastante frecuente en gatos y perros. Esta alergia ocurre cuando el felino no tiene el número suficiente de enzimas encargadas de romper las moléculas de lactosa de la leche y, en consecuencia, su cuerpo responde de forma adversa a la presencia de estos alimentos.

Algunos alimentos básicos, como la leche, pueden causar una reacción alérgica en los felinos. De este modo, los gatos adultos pueden desarrollar intolerancia a la leche de vaca. La leche no es el único alimento que puede causar alergia en los gatos. El pescado y la carne de ternera son otros dos alimentos que más alergias provocan en estos peludos comensales.

¿Cómo reconocer a un gato alérgico a la leche?

La señal más evidente de que el felino padece intolerancia a la lactosa y alergia a la leche son los vómitos. Además, las alergias a los alimentos en gatos están relacionadas con entre el 10% y el 20% de las enfermedades de la piel en felinos.

Aunque las reacciones alérgicas a la leche u otras comidas suelen producirse pocos minutos después de que el gato haya ingerido el alimento, en ocasiones los síntomas pueden desencadenarse horas después, incluso algunos días más tardes.

En cualquier caso, hay que acudir con urgencia al veterinario con el fin de evitar cualquier peligro mayor.

 

Por lo tanto, siempre que no padezcan alergias, tanto a los cachorros felinos que acaben su etapa de lactancia como a los adultos, se les puede dar productos lácteos en forma de premio. Nunca se debe dar de forma continua, ya que es peligroso para el gato y podría causarles problemas gástricos. Eso sí, evite los productos con exceso de edulcorantes como los yogures azucarados. Si se da de forma esporádica, la leche puede ser una fuente de proteínas.

¿Qué hacer cuando su gato tiene diarrea?

En ocasiones, puede pasar que los gatos evacuen heces más liquida de lo habitual y en más cantidad. No se alarmen, no es extraño acudir al veterinario por eso. Esto es debido a que el recorrido de la comida por el tubo digestivo se hace a una velocidad mayor que la habitual y el gato no absorbe los nutrientes necesarios como el agua. Una de las soluciones es preparar una dieta blanda.

Mi gato tiene diarrea, ¿ha comido algo malo?

Un motivo frecuente de la descomposición en felinos es que el animal haya ingerido alguna planta tóxica, aunque en este caso, la diarrea suele venir acompañada de vómitos en el gato. En otras ocasiones, se desencadena por un cambio brusco en la dieta del felino o por cualquier otro motivo similar que implique un desequilibrio en la flora bacteriana del estómago del peludo amigo. Esta flora bacteriana es la encargada de metabolizar los alimentos que ingiere el gato; en consecuencia, los desequilibrios implican problemas para absorber los nutrientes. Lo que explica que el estómago del felino con descomposición no pueda trabajar al ritmo que necesita. El estrés del gato, una mudanza con el felino e incluso una estancia más larga de lo habitual en el veterinario son otros motivos que pueden provocar las heces blandas. Cuando la diarrea del gato no se explica por la alimentación, es posible que se deba a una inflamación del aparato digestivo o a una infección. La diarrea también puede esconder un problema de salud más peligroso, como enfermedades en riñones, hígado o una debilidad excesiva de su sistema inmune. Por ello, el primer paso es acudir pronto al veterinario.

Diarrea en gato: ¿cómo preparar una dieta blanda en casa?

La dieta blanda para el felino, supervisada por el veterinario, ayudará al animal a recuperarse de la descomposición cuando esta tenga su origen en un problema temporal en el estómago. Este tipo de comida casera para gatos, además, le servirá para absorber (poco a poco) los nutrientes y vitaminas que necesita ingerir. Esta dieta blanda no difiere, en lo esencial, de la recomendada para los perros.

  • Pollo hervido. Hay que hervir pollo, libre de zonas grasas, piel y huesos, y cortarlo en trozos pequeños que el felino pueda meter en la boca y masticar.
  • Arroz hervido. Al igual que la dieta blanda del perro con diarrea, el gato necesita tomar arroz. Sin embargo, el tamaño tan pequeño de los granos no siempre es de su agrado.
  • Bebidas isotónicas de limón. «Este tipo de bebidas ayuda a los felinos con descomposición a recuperar parte de los nutrientes y electrolitos que pierden», explica González.
  • Mucha agua. El gato pierde gran cantidad de líquido a través de las heces, por lo que necesita recuperarla a través de la ingesta de agua.
  • Comidas comerciales para felinos con diarrea. Cuando el arroz no es del agrado del peludo comensal enfermo, la opción es acudir a las latas (mejor, porque tienen más agua) y piensos pensados para gatos con diarrea y problemas gastrointestinales.

 

La dieta blanda para el gato con diarrea incluye pollo hervido, arroz, agua abundante y bebidas isotónicas de limón. Por último, un consejo importante es que la dieta blanda deberá ser su única comida durante los dos o tres días que dure el tratamiento. Esto explica que no haya que ofrecerle otros premios comestibles como galletas para felinos ni malta.

Elegir el tamaño y modelo de la bandeja higiénica de nuestro gato para que se sienta cómodo

La bandeja higiénica del gato es una forma instintiva de hacer sus necesidades una vez que dejan de alimentarse de la leche materna y se hacen «mayores». Por lo tanto, es un lugar muy importante para ellos ya que, como bien sabemos, los gatos son uno de los animales de compañía más limpios que se puedan tener. La bandeja higiénica de nuestro gato debería cambiarse de semanalmente y de forma adecuada. En este post vamos a ver los puntos importantes que no tenemos que olvidar a la hora de cambiar y limpiar su bandeja higiénica.

Tamaño ideal para la bandeja higiénica del gato

Un gato debe tener espacio suficiente para hacer sus deposiciones en la bandeja higiénica. Hay que tener en cuenta que al felino le gusta escarbar antes y después, y para ello necesita moverse con cierta comodidad y holgura dentro de la bandeja.

La bandeja higiénica del gato no precisa, sin embargo, unas dimensiones enormes: basta con que se ajuste al tamaño del gato, con el fin de que tenga espacio suficiente para manejarse en su interior.

La bandeja de arena del gato: ubicación

El lugar donde se coloca la bandeja higiénica del gato es clave para que el animal tenga intimidad. Es recomendable evitar las zonas de paso, donde se moleste al felino cuando usa la bandeja de deposiciones.

Los gatos son animales muy limpios, por lo que es aconsejable que la bandeja se encuentre lejos de su plato de comida. Para que un gato use su bandeja higiénica de manera adecuada, el felino debe sentirse cómodo, protegido y seguro.

La bandeja del gato y la arena

La bandeja higiénica del gato se puede rellenar con varias clases de arena, desde perfumada o conglomerante hasta con forma de grandes perlas poder extra absorbente de la humedad.

La elección de la arena de la bandeja del gato debe hacerse en función de los gustos del gato. De forma que el lecho que contiene el recipiente lo debe escoger el felino y no los dueños.

La cantidad de arena en la bandeja higiénica del felino debe ser abundante, pero hay que evitar que rebose, para impedir que acabe en el suelo cuando el gato escarba y se mueve dentro del recipiente.

Para limpiar la arena de la bandeja higiénica, conviene retirar los restos de heces a diario y cambiarla en su totalidad cada tres días o, como máximo, una vez a la semana si la arena es de muy buena calidad (muy absorbente).

Cuando la bandeja está deteriorada por el paso del tiempo, conviene cambiarla por una nueva.

 

Cuando vayamos a rellenar la bandeja higiénica del gato, es importante que la cantidad de arena sea abundante pero siempre y cuando no rebose, ya que al mover la arena el gato podría echar mucha arena fuera de la bandeja. Y aunque existe una gran variedad de modelos de éstas bandejas higiénicas, las más cómodas son seguramente las que están tapadas con una puerta para que el gato pueda entrar y del mismo modo, evitar que éste esparza toda la arena por la casa o que huela a orina y heces por toda la casa. Aún así, algunos gatos rechazan estas bandejas y prefieren las que están abiertas, sobre todo si no se les ha acostumbrado desde pequeños  usar una de este tipo. Al final… cada gato con su bandeja 😉