¿Cómo evitar la diabetes?

Hoy en día, el ejercicio físico no sólo se aconseja para mantener una buena forma sino también para evitar enfermedades cardiovasculares y, también, la diabetes. Tanto para prevenir como para tratarla, la actividad física es importante para manejar esta enfermedad y, más, si se acompaña de una dieta saludable y un tratamiento farmacológico. Según estudios, se puede llegar reducir más de la mitad su incidencia si el deporte forma parte de nuestros hábitos diarios. Sin embargo, existen otros factores de riesgo de la diabetes.

 

5 días a la semana, 30 minutos, ejercicio moderado, no cuesta tanto.

No hay duda alguna sobre lo beneficioso que es para la salud el ejercicio físico moderado, incluso para las personas con diabetes. De hecho, es clave en su abordaje junto con la dieta y el tratamiento farmacológico.

Muchos estudios anuncian que, con una pequeña pérdida de peso total (del 5% al 7%), practicar 30 minutos de actividad física cinco días a la semana y seguir una dieta saludable, se consigue demorar su desarrollo y, posiblemente, prevenirla hasta en un 60%. Para estas conclusiones se recogieron datos de 3.234 individuos con riesgo alto de diabetes, además de con sobrepeso e intolerancia leve a la glucosa.

Si la persona ya sufre diabetes, los beneficios no son pocos. Por un lado, aumenta la sensibilidad a la insulina, lo que significa que con menos medicación se obtiene una mejora en el control de la enfermedad. Además, cumplir con la norma de 30 minutos de ejercicio moderado cada día, cinco días a la semana, en pocas semanas se logra disminuir la grasa corporal y el peso y, por consiguiente, hay una mejora de otros parámetros de riesgo cardiovascular que están aumentados en personas con diabetes, como la hipertensión arterial y las dislipemias. Todo ello ayuda a prevenir las complicaciones de la enfermedad.

 

Un aumento del sedentarismo o inactividad.

De hecho, en todas las investigaciones realizadas hasta el momento en personas con alto riesgo de sufrir diabetes, los resultados son claros: la modificación del estilo de vida es más efectiva que el uso de fármacos. Y eso que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que, en la actualidad, el 60% de la población mundial no practica suficiente actividad física, y son los adultos que viven en países desarrollados los más inactivos.

Además, el gasto que supone esta enfermedad tampoco es insignificante: se le destina entre el 5% y el 10% del presupuesto para salud, y más del 50% del total es debido a las complicaciones de la enfermedad.

 

Factores de riesgo de sufrir diabetes:

  • Edad: tener más de 45 años (el peligro de desarrollar diabetes tipo 2 aumenta con la edad).
  • Sufrir sobrepeso u obesidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que valores de IMC (índice de masa corporal) entre 25 y 29,9 es sobrepeso, y de 30 o más, obesidad. Pero esta medida no es útil en niños, mujeres embarazadas, ancianos y personas con masa muscular muy desarrollada.
  • Tener un perímetro de cintura elevado, que en hombres se considera si supera los 102 cm y en mujeres los 88 cm.
  • Antecedentes personales de niveles de glucemia elevados durante un tiempo, aunque ya se hayan resuelto, como en el embarazo, o secundario a la toma de algún fármaco.
  • Tener antecedentes familiares con diabetes (padre, madre o hermanos e, incluso, tíos y sobrinos).
  • Hipertensión arterial.
  • La inactividad física, es decir, dedicar menos de tres horas semanales a hacer ejercicio.

Otros especialistas en diabetes añaden estos factores: ser de origen afroamericano, indoamericano, asiático-americano, de las islas del Pacífico, hispanoamericano o latino; tener cifras de colesterol HDL bajas (menos de 35 mg/dl para lo hombres y 40 mg/dl para las mujeres) o triglicéridos altas (más de 250 mg/dl).

 

Las únicas soluciones y las más realizables son un dieta saludable junto con un ejercicio físico regular, mantenerse en un peso adecuado y evitar el consumo de tabaco. Todo para evitar este tipo de enfermedades o, por lo menos, retrasar su aparición.

Por qué es necesario ser agradecido para la salud

No siempre nos mostramos agradecidos por lo bueno que nos ocurre y si bien la mayoría tenemos numerosas oportunidades para sentirnos agradecidos por nuestra vida personal y profesional, solemos perder las oportunidades para expresar esa gratitud, especialmente en el trabajo. Una encuesta reciente realizada en Estados Unidos, ha revelado que hay una tendencia a expresar mucho menos gratitud en el espacio de trabajo que en demás lugares. Un dato curioso que conviene tener en cuenta

 

El poder sanitario de la gratitud

No poder expresar gratitud cuando tenemos el tiempo de hacerlo, es problemático puesto que la gratitud ofrece numerosos beneficios: nos permite disfrutar de las experiencias positivas, lidiar de mejor manera con el estrés y enfrentarnos de mejor manera a los desafíos, así como a fortalecer nuestros vínculos sociales. Estudios psicológicos han demostrado que escribir cartas de agradecimiento una vez por semana por 6 semanas lleva a una vida más llena de satisfacción a diferencia de invertir ese tiempo en otro tipo de actividades.

 

Además, el tomarnos el tiempo para analizar la suerte que la vida nos ha dado no sólo mejora nuestro estado de ánimo sino que además mejora nuestro estado de salud. En una serie de estudios psicológicos los doctores Robert Emmons y Michael McCollough pidieron a un grupo de voluntarios que llevaran un diario donde registraran sus actividades en las siguientes 10 semanas. Algunos debían escribir 5 cosas por las que estuvieran agradecidos, mientras que otros debieron registrar 5 molestias semanales y un tercer colectivo debía registrar 5 eventos que hayan ocurrido en cada una de esas semanas.

 

Quienes registraron sus molestias semanales incluyeron un derroche rápido de dinero, la dificultad para encontrar un sitio donde aparcar y las cenas que habían arruinado. Quienes mencionaron las cosas por las que estaban agradecidos incluyeron la generosidad de sus amigos, el aprender algo interesante o poder contemplar el atardecer a través de las nubes. Los segundos demostraron emociones positivas, mejoras a nivel de salud mental y física, y una mayor conexión hacia los demás con respecto al primer y tercer grupo.

 

Otro gran motivo de por qué necesitas expresar tu gratitud es que incluso las simples pueden tener efectos poderosos y duraderos en quienes la reciben. En un estudio de la Universidad de Harvard, los investigadores demostraron que las expresiones de gratitud hacen sentir a los demás valorados.

Así que conviene, en pro de la salud mental, estar agradecidos y demostrarlo en aquellos ámbitos y eventos que realmente nos aporta algo bueno pues nos permite sacarle más partido y trabajar en nuestra salud.

¿Cómo quitar las canas sin tintes?

Nuestras primeras canas siempre nos traen malas noticias ya que las asociamos al paso del tiempo y que nos hacemos un poco más viejos. Muchos productos existen, hoy en día, para esconder esos cabellos blancos, pero un grupo de investigadores ha encontrado un tratamiento para combatir esos cabellos no deseados. Todo ha salido por casualidad pero han encontrado una de las principales causas de la manifestación de las canas y este posible tratamiento que nos haría olvidar todos esos tintes.

Una crema para recuperar el color del pelo

Un grupo de científicos se encontraba investigando con una crema para combatir el vitíligo (enfermedad de la piel), cuando se dio cuenta de que también servía para recuperar la coloración natural del pelo. El hallazgo es el primero que propone un tratamiento real que elimina las canas de raíz, a diferencia de los tintes convencionales que lo único que hacen es ocultarlas.

El vitíligo es una enfermedad cutánea de naturaleza autoinmune en la cual se produce una despigmentación a causa de la muerte masiva de melanocitos, las células que producen el color de la piel y el cabello. Los científicos desarrollaron una crema para luchar contra el vitíligo a base de una enzima que se activa por la presencia de luz UVB. La sorpresa fue que, cuando aplicaron la crema a 2.411 pacientes, observaron algo inesperado: no solo remitía las manchas blancas del vitíligo, retornando el color normal de la piel, sino que además también se recuperaba el color del cabello y las pestañas.

El trabajo es fruto de la coordinación de científicos de la Universidad de Bradfort (Reino Unido) y la Universidad de Greifswald (Alemania). Los ingleses habían descubierto en 2009 que la acumulación de agua oxigenada en la piel y los folículos pilosos tenía un papel relevante en el progreso del vitíligo y la canicie. Este acopio sería el responsable de la despigmentación del pelo y la piel desde su interior mientras se forma. Por este motivo, los investigadores alemanes diseñaron una crema que contenía una variante de la enzima catalasa, que esta convierte el agua oxigenada en agua y oxígeno y, por tanto, evitaría su acumulación.

Como muchos aspectos en el mundo de la ciencia, la casualidad juega un papel destacado en los nuevos descubrimientos. Este trabajo también demuestra la importancia de la coordinación entre grupos de investigación básica y aplicada para ampliar el conocimiento científico y mejorar la calidad de vida de las personas.

Factores que favorecen la aparición de las canas y cómo retrasarla

Las canas son uno de los signos más comunes del envejecimiento y, por este motivo, tiene un gran impacto personal y social. Este fallo en el mecanismo de pigmentación del cabello se debe a un proceso biológico complejo en el que participan muchos factores.

Uno de los más importantes está relacionado con el deterioro de los melanocitos, las células encargadas de fabricar la melanina, que es el pigmento que da color a los cabellos y la piel. El cabello blanco asoma con el paso de los años y la edad de inicio varía en función del color de la piel. Así, son los individuos de piel blanca los más precoces (hacia los 30), seguidos de los asiáticos que empiezan a encanecer alrededor de los 40. Más afortunados son los afroamericanos, que no tienen las primeras canas hasta bien entrados los 45 años.

Cuando las canas se manifiestan de forma prematura, antes de los 20 años, casi siempre es debido a factores hereditarios. Además de la edad, el componente más importante en la canicie es la herencia y lo más probable es que se siga el camino de los progenitores, que pueden servir de indicador.

Por otra parte, hay algunas causas que pueden provocar una canicie prematura. Las más frecuentes son los trastornos hormonales, como sucede en algunas enfermedades del tiroides, y la falta de determinados nutrientes y vitaminas, tales como hierro, zinc, cobre y vitaminas B1 y B2. Asimismo, hay que tener en cuenta que el consumo de tabaco y alcohol también pueden adelantar su aparición.

De la misma manera, el cuidado que se le dé al cabello tendrá una gran influencia en la canicie. Mantener una adecuada higiene capilar, no lavar el cabello con agua muy caliente y evitar el abuso del secador eléctrico o planchas son pequeños hábitos que ayudarán a postergarlas. Es recomendable, también, no abusar de los tintes.

 

En cuanto a la apariciones en ambos sexos, suele aparecer más en las mujeres, quienes somos mas propensas, y desde jóvenes tienen a teñir el pelo. La solución es abandonar estos productos y optar por unos más suaves y reservar los tintes para más adelante. Los tintes permanentes aunque sean seguros, se debe dosificar. Muchos de ellos contienen agua oxigenada y amoniaco y su uso excesivo daña el cabello y el cuero cabelludo. También favorecen el desarrollo de la caspa y la caída del pelo.

Efectos adversos y nueva normativa de los cigarrillos electrónicos

Aunque mucha gente se pase al cigarrillo electrónico al creer que es mejor que el tabaco normal, éstos presentan ciertos efectos adversos para la salud y es por ello que ya se están regulando con una nueva normativa en España y en Europa. No son todo ventajas al usar este tipo de cigarrillos.

Las ventajas de los «e-cigarrillos» han quedado en entredicho. Hace poco, en Galicia se ha diagnosticado el segundo caso de neumonía lipoidea, debido al consumo abusivo de estos cigarrillos y, en concreto, a uno de sus componentes, la glicerina vegetal. El primer caso documentado de esta grave consecuencia para la salud se publicó en la revista Chest. Sin embargo, la Asociación Nacional Española de Vapeadores (ANEV) ha puesto en duda la vinculación del caso de neumonía y el consumo de los «e-cigarrillos», y dice que puede deberse a un consumo abusivo, ya que el afectado llegó a vapear más de cinco cargas diarias, equivalentes a cinco cajetillas de tabaco clásico.

No obstante, cada vez se publican más artículos en revistas científicas sobre sus potenciales efectos perjudiciales que constatan que no sirven como puente para dejar de fumar, sino que crean nuevos adictos a fumar, en este caso, cigarrillos electrónicos.

Los efectos de los ‘e-cigarrillos'

Los «e-cigarrillos» son pequeños aparatos electrónicos, que simulan la forma de un cigarrillo, aunque también hay algunos que imitan la de una pipa o de un puro. Emiten un vapor -vaporizan o «vapean»- consistente en una mezcla de nicotina, propilenglicol y otros compuestos químicos. Se utilizan inhalando el vapor que producen en lugar del humo de los cigarrillos clásicos. Por esta razón, a sus usuarios se les denomina «vapeadores».

En su interior, este aparato consta de varias partes: una batería recargable, un atomizador y un depósito o cartucho que contiene el líquido que después se vaporiza. Este líquido lleva nicotina (entre 6 y 24 mg), por lo que también produciría adicción; propilenglicol, un alcohol que se emplea como aditivo en alimentos y algunos fármacos inhaladores y nebulizadores, que provoca irritación en la garganta y en las vías respiratorias y conduce a la tos y el ahogo; y aditivos alimentarios que dan diferentes sabores (chocolate, vainilla, menta o fresa). Estos sabores permiten disfrazar la nicotina, pero se vehiculizan a través de sustancias oleosas que se depositan en los pulmones, sin que estos tengan capacidad de absorberlas, y que podrían conducir a reacciones inflamatorias y enfermedades intersticiales. Además, es posible que lleven más sustancias que no figuren en el etiquetado.

Así, aunque sean menos tóxicos que los cigarrillos convencionales, parece ser que no son tan inocuos como se ha pretendido vender. Su eficacia para dejar de fumar o como estrategia de reducción de daños no ha sido demostrada. Pueden causar, entre otros efectos secundarios, sequedad de la boca e irritación de boca y garganta. Se desconocen sus consecuencias a largo plazo y también los efectos por la inhalación pasiva del vapor que exhala el usuario, según información de la Red Catalana de Hospitales sin Humo basada en diferentes investigaciones científicas.

A corto plazo, un estudio publicado en Chest en el 2012 señalaba que basta fumarlos cinco minutos para que tengan efectos indeseables para la función pulmonar. Además, al contener sustancias idénticas a las de un pitillo convencional, como la nicotina, no se descarta que sean potencialmente cancerígenos, según ya advirtió en 2013 en un comunicado la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).

Nueva normativa para los ‘e-cigarrillos'

En España, desde el 1 de enero de 2014, fumar cigarrillos electrónicos está prohibido en hospitales y centros de salud, colegios y zonas infantiles, en las administraciones públicas y en el transporte público, en virtud de la primera normativa que se aprueba en nuestro país para regular su uso y a la que ya se habían adelantado algunas comunidades autónomas, como Andalucía, Cataluña y la Comunidad Valenciana, que ya habían empezado a aplicar restricciones a los «e-cigarrillos» en 2013.

Estas prohibiciones, recogidas en la nueva Ley General en Defensa de los Consumidores y Usuarios, dejan fuera a los bares y restaurantes, donde se podrán utilizar. En el transporte público, la prohibición se extiende a todo tipo de vehículos (metros, trenes, autobuses, barcos y aviones), aunque en este último caso solo afecta a vuelos de aerolíneas españolas o a los que comparten con compañías extranjeras.

El propósito fundamental de las limitaciones de uso impuestas a los cigarrillos electrónicos no solo es velar por la salud de la población, sino sobre todo disuadir a los jóvenes de que se inicien en el hábito de fumar. Por ello, se ha prohibido la publicidad en programas dirigidos a menores de 18 años, así como durante 15 minutos antes o después de su emisión, entre las 16:00 y las 20:00 horas en los medios audiovisuales, y la aparición de menores de 18 años en sus anuncios. Asimismo, su difusión deberá hacerse en los soportes y franjas horarias no prohibidos por la Ley Antitabaco y se prohíbe que las cajetillas anuncien indicaciones terapéuticas sin el reconocimiento expreso de un organismo público competente.

A pesar de estos avances en el marco regulatorio de los cigarrillos electrónicos, a raíz del caso de neumonía declarado y de las evidencias científicas que van destapando sus potenciales efectos nocivos, en España, cada vez más voces que reclaman una normativa más restrictiva. De hecho, 37 sociedades científicas, como la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), la Organización Médica Colegial (OMC) y el Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT), han presentado una declaración al Senado, cámara en la que deberá debatirse ahora la nueva normativa, donde piden que esta se equipare a la que se aplica para el tabaco convencional.

En Europa, el Parlamento Europeo ha aprobado una nueva directiva sobre tabaco, que prohíbe la venta de paquetes de menos de 20 cigarrillos y que regula los «e-cigarrillos» como productos medicinales, si se demuestra que presentan propiedades curativas o preventivas, o de tabaco, si no es el caso. Además, establece que deben llevar una advertencia sanitaria que cubra el 65% de la superficie de la cajetilla, frente al 30% de la superficie delantera y el 40% de la trasera que deberían quedar cubiertas con la legislación anterior. El objetivo fundamental de la norma es disminuir el atractivo que el consumo de estos cigarrillos ejerce sobre los jóvenes.

 

El cigarrillo electrónico se ha convertido en un mercado cada vez más creciente y donde la demanda está en auge. Desde hace poco, se llevan vendiendo éstos de una forma poco nociva de fumar, también como una solución para dejar de fumar y al ser unos cigarrillos permitido su uso en varios lugares como los aviones y oficinas. Pero no todo es bonito, ya que en realidad no es menos peligrosa que el tabaco convencional puesto que contiene casi los mismos componentes.

Enfermedades muy comunes durante la primavera

Como dice el refrán «en abril, lluvias mil». Y es que con el mes de abril llega la primavera, el buen tiempo… y los resfriados. Las enfermedades como las amigdalitis y la sinusitis son las más comunes, pero no son las únicas enfermedades que contraemos en esta época. Los incesantes cambios de temperatura entre el buen tiempo y las lluvias repentinas hacen que nuestras defensas estén bajo mínimos y somo más propensos a contraer enfermedades como la varicela o la «enfermedad de la bofetada», que vamos a explicar en este post.

El megaloeritema o «enfermedad de la bofetada»

El megaloeritema es una infección vírica leve que afecta más durante la primavera y que está provocada por el parvovirus B19, un virus humano. También denominada «enfermedad de la bofetada», tal como su nombre deja entrever, es una erupción que se localiza en las mejillas. Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), cerca de la mitad de la población adulta ha sufrido la infección, aunque muchos no lo recuerdan.

Se acompaña de síntomas similares al catarro, con poca fiebre y malestar general y, cuando ceden, surge la erupción de color rojo intenso. Después, el exantema se extiende hacia abajo en forma de manchas pálidas, excepto en el reverso de manos y pies. Con el tiempo, las manchas se van aclarando y terminan por desaparecer hacia las dos semanas. Otros signos pueden ser dolor articular (sobre todo en adolescentes y adultos) o anemia.

Tiene una incubación que va entre los 4 y los 28 días. Es una enfermedad muy contagiosa, que se transmite mediante las pequeñas gotas expulsadas por la boca al hablar, toser o estornudar (gotas de Flügge), o por compartir la cubertería con un infectado. No obstante, es benigna, no suele requerir tratamiento y la recuperación es rápida. No hay vacuna contra el parvovirus culpable pero, una vez superada, el afectado se vuelve inmune.

Personas con cardiopatía: cuidado en primavera

Los cambios estacionales influyen en las patologías cardiovasculares, y la primavera es una época en la que aumenta tanto la incidencia de infecciones respiratorias como de enfermedades alérgicas. Para Javier Ortigosa, miembro de laFundación Española del Corazón, los procesos infecciosos descompensan a los pacientes con cardiopatías, porque actúan como factor que predispone a la insuficiencia cardiaca.

Por ello, se recomienda que, cada año antes de que llegue el invierno, este grupo de población se vacune contra el virus de la gripe y el neumococo, ya que los cambios de temperatura habituales en primavera favorecen los procesos víricos, como bronquitis aguda y la neumonía.

Por otra parte, es habitual que los afectados por alguna alergia tomenantihistamínicos para aliviar los síntomas. Según declara Ortigosa, a pesar de que no suponen ningún peligro para los pacientes cardiópatas, hay que controlar a quienes, sea por la propia enfermedad cardiaca o como efecto secundario de algún otro medicamento, tienen el QT largo (anomalía del sistema de conducción del corazón).

Si la alergia reviste gravedad y la persona precisa corticoides, hay que extremar la vigilancia de la tensión arterial o del desarrollo de síntomas asociados a la insuficiencia cardiaca, puesto que estos medicamentos provocan en el organismo retención de sal y agua.

 

Otras enfermedades muy comunes que aparecen durante la primavera, como la varicela pueden, ser muy peligrosas. Se puede contagiar por contacto con las lesiones de la piel y produce picores intensos que empiezan en la cara y luego se extienden poco a poco por todo el cuerpo. Esta enfermedad, que suele aparecer antes de los 10 años crea una inmunidad para todo el resto de la vida del individuos que ya la haya padecido. Y aunque sea una enfermedad que dura dos o tres día, los especialistas recomiendan vacunarse contra la varicela a todos los pequeños.