Instalar un estanque en nuestro jardín no es muy caro, a pesar de lo que parece. Estas decoraciones le dan un toque más fresco a nuestro jardín y nos permite incluso tener algún animalito dentro de este estanque, a parte de las plantas que decoran el jardín de forma natural. Aunque pueda parecer muy caro y difícil de montar, un estanque tiene mucha menos dificultad de lo que parece. En este post te explicamos cuales son las ventajas e inconvenientes de instalar uno y el tipo de estanque a instalar.
Beneficios de contar con un estanque en el jardín
La instalación de un estanque permite crear un rincón de frescura y remanso en el jardín y, de esa manera, poder gozar aún más del contacto con la naturaleza en este espacio de la casa. La presencia del agua contribuye a regular la humedad en el ambiente y la temperatura, debido a que mejoran las condiciones para todas las plantas y los árboles en general.
En el momento de decidir la instalación de un estanque en el jardín, se deben tener en cuenta dos factores muy importantes. El primero es el sitio que ocupará, para que no represente un obstáculo y cuente con las condiciones climáticas adecuadas. El segundo, sus características: los materiales de los que estará construido, qué forma tendrá y cuál será su decoración.
Dónde ubicar un estanque
El lugar idóneo para instalar un estanque en el jardín es una zona que reciba la luz del sol durante algunas horas (entre 4 y 6) al día. Esta iluminación posibilita que las plantas acuáticas vivan en el estanque, pero impide que el agua se caliente demasiado, lo cual favorecería la proliferación de algas u otras especies poco deseables. Las raíces de algunos árboles son tan extensas y fuertes que su desarrollo puede afectar el lecho del estanque
También conviene evitar la cercanía de árboles, por más de una razón. Por un lado, ciertas especies (como la higuera) desarrollan raíces muy extensas y fuertes, cuyo crecimiento podría afectar al lecho del estanque. Por otro, la caída de las hojas cuando llega el otoño puede hacer muy engorrosa la tarea de limpieza, sobre todo si es un árbol de hojas caducas (pierde todas sus hojas cuando llega la temporada invernal). Los de hoja perenne también ensucian, pero bastante menos.
El viento es otro factor que se debe tener en cuenta, porque puede arrastrar demasiadas hojas, ramas u otros elementos al agua y ensuciarla mucho. Conviene que el estanque se halle en un sitio resguardado de las corrientes de aire o, en todo caso, donde lo normal sea que lleve los pequeños objetos en otra dirección. Por otro lado, el aire sobre el estanque en invierno hace que el frío se sienta todavía más.
Formas y materiales de los estanques
Existen diversas formas y materiales para construir estanques. Su nivel puede estar tanto a ras del suelo, como más elevado, contenido por un pequeño muro. Otra alternativa consiste en edificar pequeñosdesniveles en el jardín, lo cual puede resultar algo más costoso. Es imprescindible, por supuesto, sellar bien toda la superficie para evitar filtraciones.
Otra posibilidad es la de adquirir un estanque prefabricado (de plástico, PVC, fibrocemento, etc.), que se instala en un hueco en el suelo del jardín. Estos estanques se fabrican con medidas y formas estandarizadas para adaptarse a distintos espacios.
Si vamos a instalar un estanque en el jardín y queremos que parezca lo más real posible, es muy aconsejable añadir plantas acuáticas o flores. Plantas acuáticas como el jacinto de agua o la flor de loto son elementos perfectos para este tipo de estanque ya que además, contribuyen a oxigenar el agua, punto importante si también pretendemos tener algún pez u otro animal acuático. Los estanques son elementos ideales para proporcionar frescura y crear un ambiente relajado en el jardín.