Telegram: ¿mejor alternativa que el Whatsapp?

Hace unos días, se anunciaba la compra de Whatsapp por la conocida compañía Facebook. Hace un par de años, Whatsapp se presentaba como una innovadora aplicación de mensajería instantánea para móviles. Hasta hoy, tiene más de 430 millones de usuarios activos. Pero no todo son ventajas ya que es una app de pago y se cuestiona bastante sus parámetros de seguridad y privacidad. Recientemente, se ha creado una app gratuita tanto para Iphone como para Android que resulta casi impermeable al exterior. Telegram puede ser la futura alternativa a Whatsapp.

Telegram, app gratuita de mensajería instantánea

Aunque Telegram no es una aplicación nueva, es ahora cuando comienza a acelerar su cuota de descargas en todo el mundo. Fue lanzada a mediados de 2013 y se ha puesto de moda en España en las últimas semanas. Según sus promotores, en la primera semana de febrero de 2014, unos 200.000 españoles se registraban a diario en la app. También crece, pero de forma más moderada, en Latinoamérica, en países como México, Argentina, Colombia y Chile.

Los impulsores de este proyecto son Pavel Durov y Nikolai Durov, fundadores de VK, la red social rusa que también tiene presencia en otros países europeos y que cuenta con más de 100 millones de usuarios activos. Según Pavel Durov, Telegram no persigue el lucro y, por tanto, la aplicación seguirá siendo gratuita y no se mostrarán anuncios ni otras acciones de marketing de cara a rentabilizarla.

Chats secretos y alto nivel de cifrado

Telegram compite con WhatsApp ofreciendo una mayor seguridad de la plataforma. Las conversaciones se cifran con los niveles criptográficos AES 256 bits, RSA 2048 y Diffie-Hellman, según el tipo de chat creado por el usuario. Los tres son en teoría indescifrables y se usan en las pasarelas de pago por Internet, lo que da idea de su seguridad.

Una de las características principales de Telegram es la opción de crear chats con otros usuarios de forma temporal y secreta. Es decir, se puede configurar un chat secreto con otro usuario con las siguientes características: las comunicaciones están cifradas entre ambos clientes de mensajería, los mensajes no dejan rastro en los servidores de Telegram, no se permite el reenvío de comunicaciones a otros chats y permite configurar un apartado de autodestrucción de los mensajes una vez que ha sido leído por el otro usuario. La autodestrucción puede ser desde dos segundos, cinco segundos, un minuto, una hora, un día o una semana.

Chat para ordenadores

Otra de las diferencias con respecto a WhatsApp es que el código fuente del cliente de mensajería es software libre, lo que posibilita la creación de clientes no oficiales para otras plataformas como tabletas con iOS y Android, ordenadores con Windows, Linux y Mac OS X, así como para Windows Phone 8. También existe una extensión para el navegador Chrome. Telegram cuenta con una API (conjunto de instrucciones de programación) que permite el uso multiplataforma del servicio.

Por otro lado, esta aplicación deja crear grupos de hasta 200 contactos, frente a los 50 de su principal competidor. Además, los usuarios pueden enviar todo tipo de archivos, hasta un máximo de un gigabyte de tamaño por archivo. En este aspecto, WhatsApp sólo permite el envío de archivos de vídeo y audio.

Pero no es oro todo lo que reluce, Telegram también tiene sus desventajas en su servicio. En todos los nuevos registros, los usuarios son informados de los Términos y Condiciones de uso. Sin embargo, Telegram no informa totalmente de sus condiciones como por ejemplo el hecho de no informar sobre su política de privacidad, ni el lugar ni la duración de los datos del cliente. Por último, eliminar la cuenta de Telegram puede resultar todo un calvario ya que, tras darse de baja a través de una página web, la cuenta no está totalmente desactivada siguiendo activos los grupos y chats creados por los usuarios.

A pesar de estas últimas desventajas, ¿conseguirá Telegram sustituir a Whatsapp?